COLOMBILANDIA: Nos Unimos o Nos Hundimos.
No vale la pena adentrarse a analizar los
resultados de las votaciones legislativas del pasado 11 de marzo, realmente no
fue mucho el cambio, es más, podría afirmarse que quedamos peor de lo que
veníamos, ya que pese a los antecedentes de los partidos políticos corruptos
que nos vienen gobernando desde el congreso, los colombianos (o por lo menos una parte muy grande de ellos)
los volvió a elegir, no los castigaron, y aunque existieron cambios de forma,
el fondo aún sigue estando podrido, corrupto y con las mismas mañas e intereses
de siempre, por lo que tristemente debo aceptar que continuaremos con el mismo
rumbo y hacia el mismo hueco del que ha sido difícil escapar. Para rescatar de
dicha jornada, la llegada del partido de los Decentes como nueva fuerza de
izquierda al Congreso, que a pesar de no sumar muchas curules, vienen a sumar
fuerzas en una batalla que requiere de más diversidad, nuevas ideas, propuestas
novedosas y representando los ideales de una minoría de la sociedad colombiana
que viene pidiendo a gritos el cambio.
Respecto a las consultas de “Derecha e
Izquierda” se evidenció en el resultado lo lógico, creo que la gran borregada
del país apoyo al candidato o títere del Expresidente Uribe, sacando a flote el
machismo que siempre los ha caracterizado evitando que una mujer pudiera dar la
pelea en la carrera por la presidencia, y otra gran parte de los electores de
“izquierda” se inclinó por el exalcalde de la ciudad de Bogotá, arrojando un
resultado que ya se conocía sin necesidad de la consulta, pero necesario al
momento de conocer cuántos ciudadanos están buscando la transformación del
país.
Bueno, conociendo esto, los lectores se
preguntarán ¿Y ahora qué sigue?
No es muy difícil saberlo, recordemos que
“centro y derecha” siempre han estado en el poder, tienen la facilidad de
combinarse, apoyarse, pelearse, reconciliarse, y hasta cuasi-pelearse, pero
nunca atacarse, lo que los convierte en una fuerza arrolladora y asquerosamente
fuerte en una campaña que ahora si entra en la parte más importante de todas,
donde inician los debates, los ataques, las propuestas, las estrategias, las
coaliciones, los apoyos, las campañas sucias, las promesas incumplibles y como
tal, la parte donde los candidatos empiezan a mostrar de lo que son capaces de
hacer con tal de llegar al “trono” del poder , así su dignidad y moral queden
pisoteadas y en entredicho, recurriendo a medidas desesperadas para
desprestigiar a sus competidores, demostrando lo que siempre han sido y siempre
tratan de ocultar, y es que realmente son unas ratas de alcantarilla. Respecto
a los candidatos de “izquierda” o “Centro-Izquierda” o “Pseudo-Izquierda”, o
como le quieran llamar, vemos un
comportamiento totalmente diferente, donde la batalla de egos e ideas les
impide conformar un equipo unido, enfocado, cohesionado y por lo tanto con la
fuerza necesaria para enfrentar a sus adversarios, una división que los afecta
en gran medida y que puede ser su gran debilidad de continuar por la misma
senda, un comportamiento que terminará acorralando a los electores hacia un
dilema que resolverán escogiendo a los malos conocidos, dándole continuidad al
mismo sistema de siempre.
Nos Unimos o Nos Hundimos mas allá de ser una
tendencia en redes, un clamor, una solicitud hacia algunos candidatos
alternativos o una simple o sencilla moda, también es un movimiento dirigido
hacia todos los colombianos, no a una parte de ellos, sino a todos los que
amamos y trabajamos por este país, haciéndoles un llamado a repensar y
reflexionar sobre lo que hay y lo que queremos para todos nosotros, acerca de
lo que deseamos para las próximas generaciones, lo que les vamos a dejar a
nuestros hijos y los hijos de ellos, un llamado que implica cambios en nuestra
forma de pensar y de actuar, para borrar de nuestra genética los prejuicios y
la intolerancia por las nuevas ideas, permitiendo que Colombia pueda florecer a
todo nivel, destruyendo ese pasado que nos ha convertido en uno de los países
más desiguales del planeta, con altos índices de corrupción, pobreza, inequidad
e injusticia, y abriéndole la puerta a las
transformaciones que debimos adoptar hace mucho, pero que por nuestra misma
culpa hoy nos tienen en un retraso respecto a otras naciones que incluso son
más pequeñas y con menos recursos que ofrecer.
Abramos los ojos, recordemos nuestra historia y
nuestros errores como electores, hagamos un balance y tomemos decisiones en
torno a esto. No es bueno mirar caras para elegir a un candidato, no es
correcto que otros elijan por nosotros, y tampoco es sano dejar de votar por la
pérdida de credibilidad en nuestra política. No es mi intención ser repetitivo
en mis pedidos, pero al ver lo del pasado día de elecciones, me doy cuenta que
mucha gente aún sigue sin despertar, viven conformes y resignados, y aun peor,
eligen por elegir sin tener en cuenta que están escogiendo su porvenir con su
voto.
Si es posible que compartan esto lo
agradecería, dejo claro que no vivo ni dependo de mis artículos, únicamente
busco que Colombia sea un país crítico hacia lo que tenemos, inconforme con
nuestro gobierno, pretendiendo que con ello algún día más gente deje de comer
cuento y sean capaces de exigir lo que por derecho es nuestro. Espero que las
elecciones hacia la presidencia se decanten hacia el candidato que más nos
convenga a los ciudadanos y por lo tanto al país y sus recursos, y no por el
candidato que más le convenga a la maquinaria.
MULDDER CRIOLLO
Comentarios
Publicar un comentario